Parece que se perdió por poco. Pero realmente, fue así?
Los Pittsburgh Steelers acaban de perder su tercer juego de la temporada como visitantes, en Nashville, Tennessee, frente a un mal equipo como los Titans. Es el segundo encuentro que pierden mediante gol de campo restando apenas algunos segundos en el reloj.
Este punto sea tal vez el más frustrante para la Nación Steeler.
La sensación que este aficionado tuvo durante los 2 cotejos en donde se perdió de este modo (Oakland Raiders y el último versus los Titans) es de una tensión, un stress que va in crescendo desde el primer cuarto y que no se acaba de resolver porque el partido nunca se termina de cerrar, de “abrochar” (como solemos decir por estas latitudes). Al final del día y en los últimos 10 minutos del último cuarto la defensiva se mostrará incapaz de detener la estocada final y todo se pierde.
Claro que, llegar a ese punto esperando que la defensiva mate o muera, significa que durante el resto del juego no se obtuvo la suficiente ventaja para transcurrir los minutos finales dejando que el reloj corriera a su favor.
Dar aliento a un muerto...
Sin dudas este partido lo perdieron los Steelers “en muchas áreas del juego”, tal cual lo afirmado en conferencia de prensa por el Entrenador Jefe Mike Tomlin. “No estamos haciendo lo suficiente para terminar los partidos en ambientes hostiles”, dijo al finalizar el juego
Los Pittsburgh Steelers no pudieron responder a la situación planteada por las lesiones que una a una fueron apareciendo desde temprano en el juego. (C Maurkice Pouncey, LB Chris Carter, T Marcus Gilbert, RB Rashard Mendenhall, RB Isaac Redman y LB Brandon Johnson) Quedaron sin juego terrestre y con una línea ofensiva diezmada: el juego terrestre, que parecía haber renacido tan solo cuatro días antes, quedó limitado a unas exiguas 56 yardas.
- Se desbalanceó la ofensiva, desplazándose hacia el juego aéreo: 22 corridas con un pobre promedio de 2,5 yds por acarreo, contra 40 intentos de pase.
- Otra vez el mariscal Ben Roethlisberger tuvo sobre sus hombros el peso de la ofensiva. 24 pases completos sobre 40 intentos para 363 yardas, 1 INT y 1 TD fueron sus números de la tarde en la Ciudad de la Música.
- No deja de sorprender la falta de sincronía entre “Big Ben” y el que fuera su objetivo predilecto en la temporada pasada, el WR Mike Wallace (excepción hecha del único pase de TD que lanzó el QB)
Miller, Sanders, Brown y hasta Redman fueron los objetivos prioritarios, buscándolo solamente en 4 oportunidades, 2 de ellas con pase incompleto.
La línea ofensiva vió alterado su funcionamiento desde la primera jugada del partido para ellos, cuando se lesionó el centro M. Pouncey. No pudieron contener las embestidas de los linebackers exteriores de los Titans, situación de apremio que muchas veces fue disimulada por la movilidad de Roethlisberger.
La ofensiva cayó en un abismo desde el final del 1er cuarto y durante todo el segundo en donde el resultado de sus marchas fueron: despeje bloqueado (que habría de terminar en TD para los locales) / despeje / despeje / despeje / pase interceptado (que también resultaría en puntos de Gol de Campo para los Titanes)
Si analizamos el desempeño de la defensiva a lo largo de esta temporada hay números generales que no son para nada malos: la cantidad de yardas totales permitidas son 1479 (3° en toda la NFL), permiten 475 yds por tierra (6° NFL).
- Si analizamos las yardas totales por aire, permiten 1004 yds (3° NFL) promediando 208 yds por juego (4° NFL)
Por tierra ocupan el puesto número 22 en fumbles forzados (solo 4 de los cuales recuperó la mitad) La defensiva volvió a fallar en cuanto a la recuperación de pelotas, obteniendo solo 1 INT a traves de Lawrence Timmons.
- Pero las estadísticas no siempre explican lo que pasa en los partidos.
Las claves para el resto de la temporada, lo que puede marcar la diferencia entre las vacaciones tempranas o la postemporada se reduce a cuatro ítems:
- Control de la línea de golpeo
- Hacer las jugadas que “hay que hacer”
- Equilibrar la ofensiva fortaleciendo el juego terrestre y
- Recuperar pelotas para la ofensiva.
Todos estos puntos por ahora parecen muy difíciles de conseguir. La línea ofensiva tiene muchas bajas por lesiones. Los corredores también están lesionados.
Durante el juego contra Philadelphia se recuperaron pelotas por fumbles y nada se hizo con ellas...
Ahora los Steelers están 2-3 y 0-3 jugando de visitantes.
Hacia adelante quedan partidos “on the road” en los que se puede perder perfectamente: Cincy, NYG, Baltimore y Dallas .
Queda poco lugar para los errores si se quiere llegar a la postemporada.
- Dr. de Acero
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